domingo, 7 de octubre de 2007

LA SIRENITA, by SUBCOMANDANTE ANTONIO

(Contiene spoilers sobre pelis porno)

Cineblog de Palacete da hoy una vuelta de tuerca (tour of the tuerk, en inglés) y tratará no sólo un filme en particular si no un género en general:


EL PORNO.


Oh, el porno.

Decía el otro día Raimon, haciéndose voluntario merecedor de la colleja más sonora jamás dada: "vista una, vistas todas”.


Y una mierda.


Nunca dio para tanto un bucle tan definido como: uno, limpieza de sable; dos, amorramienta al pilón; tres, trufada de pavo; cuatro, ensanchamiento y rotura de maletero; y cinco, lechazo in the face (nótese así mismo la contribución del género al Thierry Henryquecimiento del léxico castellano).


Pongo en ON el modo Subcomandante cebolleta y les cuento que, a la temprana edad de diez o doce años, mi vecino (de mi misma edad, ojo) vino un día a mi casa contándome que se había hecho con una cinta vhs muy sospechosa de la habitación de su hermano.


Poco imaginaba yo poraquelentònses que el título de aquella cinta iba a quedar tatuado para siempre en mi memoria:


Dos mujeres y un marido.


El plan trazado fue de lo más urdido y concienzudo (nótese la nula originalidad del autor a la hora de adjetivar "plan")


Aprovecharíamos una ausencia de sus padres para verla.


Llegado el momento, lo que vi aquel día fue una de las experiencias más paranormales de mi vida: ¿realmente ESO podía hacerse? ¿Por qué aquel tío la tenía como mi brazo? Y, lo más grave, ¿por qué yo la tenía como su meñique?


A fuerza de visionados y desgaste de cabezales, una realidad algo distorsionada se fue forjando en mi mente:


a) bastaba con guiñarle el ojo a una chica para follársela y


b) los preliminares son milongas de la COPE.


Pajote aquí, pajote allá, el tiempo fue pasando, hasta que una nueva puerta se abrió ante mi generación para facilitarnos enormemente la vida y evitar riesgos innecesarios:


Internet.


A servidor le pilló en su apogeo pajerístico: los dieciséis. Recuerdo como, con mi modem 33600 y una conexión más lenta que un central negro del Barça, esperaba pacientemente a que se cargara la foto de un chochamen en primer plano, talega en ristre. Luego llegarían las primeras pelis en CD, que aceleraron enormemente cualquier proceso oNaNístico.


Por otro lado, la educación sexual en las escuelas debería palidecer de vergüenza al compararse con las virtudes pedagógicas del porno. Yo, como todos, no pensaba precisamente en "introducir pene y glande en vagina y fecundar óvulo " con la novieta de turno.

Tres meses de gilipolleo y algún "te quiero" más tarde, llegaría el gran día, aquel en que pondría en práctica las enseñanzas de tantas y tantas pornacas y pondría a Lucía mirando a Cuenca.


El plan era facilísimo, a priori: nos empezaríamos a besar en el sofá mi habitación (como en "Indiana Jones Y El Rabo Maldito"), me empujaría contra la cama (como en "Fue a por trabajo y le comieron lo de abajo"), me arrancaría los gallumbos a bocados (como en "El Conejo De La Bruja De Blair") y se amorraría al cimbrel mirándome a los ojos (como en "Si Yo No Soy Curro Jiménez, Qué Hago Con Este Trabuco")


Seguidamente, le haría una limpieza de bajos (como en "Soy puta y mi coño lo disfruta") para, momentos después, chachannn, empujármela (como en "Mujeres Al Borde De Un Ataque De Miembros"). Con un poco de suerte, habría sexo anal (como en "Arma Rectal") y finalmente, happy end (como en "El Cid Porculeador").


Lo que pasó realmente, en otro post.


En fin, que desde aquí agradezco tantos buenos ratos y mando un fuerte abrazo a toda la industria porno, y especialmente a Silvia Saint, culpable sin embargo de mi artritis crónica en la muñeca de mi mano de las pajas.

Y, a los chavalines que nos leen (haberlos háylos), decirles que no saben la suerte que tienen de poder ver porno incluso en sus Ipods, en la intimidad y cobijo de su habitación, lejos del riesgo contínuo que corríamos mi generación, con una oreja puesta en la pornaca y otra en la cerradura de la puerta de la calle, por si venían los papis.


Y eso sin contar el pavor que daba sólo imaginar que algún día la cinta podía quedarse enganchada en el vídeo. De hecho, ¿quién no tiene un amigo al que le haya pasado?

13 comentarios:

Lula dijo...

Uixxx
Prime otra vez.... voy a empezar a preocuparme. Bueno, mejor mañana.

A mi todo esto me pilló muy mayor y muy... no sé, son más cosas de chicos no? por lo menos en mi época.

Echo en falta fantasias de sexo en grupo o por lo menos tríos.

Gran post Subby!!

Jordi dijo...

Buenísimo el post. Todos hemos pasado por ahí, y quien diga lo contrario miente como un bellaco.

Por no hablar de lo de comprar el "Penthouse" en el quiosquero de la esquina y llevarlo escondido en la carpeta de los apuntes hasta casa... ¡Ah, ese riesgo!

Otros tiempos, sin duda. Hoy hay tanto porno que se ha vuelto hasta aburrido.

Anónimo dijo...

Yo como habrán adivinado nunca he consumido este tipo de producto.

Bueno, confession. Mi primera vez con una peli porno:
Película. Sex Machine (Director. Michale zenn)
Edad. 17 años (¿o 16?)
Modus operandi. Día de fiesta en el colegio. Le echo valentía y decido ir a un videoclub. Habilmente voy a un videoclub alejado del barrio, no vaya a encontrarme al vecino al lado, y cojo la peli en cuestión. Para disimular también me llevo "Pena de muerte" de Tim Robbins. Vuelvo a casa sin prisa pero sin pausa. Al cruzar la esquina encuentro que mi padre está abriendo el portal de casa, me ve y me espera para subir. Sudores fríos. Escondo la película hábilmente en mi cazadora de cuero, aunque la de pena de muerte sí la tengo que llevar en la mano. Me invento la excusa más rocambolesca imaginada (He ido a ver a un amigo de EGB, y estaba en el videoclub de la familia y claro,ya que estaba allí he pillado una peli) que dudo de su fiabilidad. Pero llego a mi casa y puedo esconder la cinta a tiempo. Solo tengo que esperar unos larguísimos 45 minutos para que mi padre vuelva a dejarme solo en casa.
VAloración: Pseee. El argumento de la cinta es algo tonto y no me acabó de convencer. En la dirección es porno made in USA, con lo que eso supone: Chicas asiliconadas, mucho orgasmo fingido y poca imaginación. Mas alla de un 69 en posición vertical durante un trío el resto es bastante olvidable.

Luego pusimos el canal plus y la cosa fue más facil. Más tarde con internet ya se pierde todo el mérito. Pero como dice J. esa excitación ante el riesgo de que te pillasen era más agradable que ver la película en sí (bueno, casi)

Pd: Negaré toda esta historia si alguien de mi familia entra en este post.

Alfi dijo...

Gran post!!.

La de anecdotas qu epodriamos contar, sobretodo los que tenemos mas de 30...

Creo que ya lo conté en algun blog, recuerdo que teniamos unos 14 o 15 años, vimos en el videoclub donde era socio (opr cierto, los videoclubs aun existen???) una pelicula de la serie "Selenna" donde en portada estaba la mismisima SAMANTHA FOX!!! (clasica foto suya de medio cuerpo enseñando el tetamen)

Se nos pusieron los ojos como sartenes y faltó tiempo para reunir las 300 pesetas que valia el alquiler y buscar en casa de quien la podiamos ver...

La gran decepcion es que Samantha no apareció ni en los creditos.

Pardillos...

PENELOPE dijo...

Gran post, Sub, gran post.

Claro que yo nunca he visto ninguna...noooo...pero por lo que me "explican" se ve que los doblajes son muy graciosos... y que los argumentos son muy trabajados...se trabajan mucho...y que ellas llevan unos taconazos de impresión ( aún no se para qué porque de pie duran poco) y unas uñas impresionantes!...por lo que me explican, ojo.

Alfi dijo...

Cierto Pe. Lo mas curioso es que ellos, van siempre con tejanos PERO NUNCA LLEVAN GALLUMBOS!!

MARRANOS!!

PENELOPE dijo...

Nooo???

alex dijo...

¿Esto era de pelis o de saber como se la peló por primera vez Sub?

Anónimo dijo...

mucho ojo pues a mi bisabuelo le gusta "Harry el Eyaculatór", la tercera de las entregas de la saga de las de Harry

aquella según dice él del "Kim Is bút" o algo así

en todo caso a partir de ahora a Subby le llamaremos alias " el Greco", otramente dicho el manco de Lepanto...

O sino mejor el hombre del brazo ortopédico en la peli "El fugitivo"

;^) Emili.

Unknown dijo...

Grande!!!

Mi primera peli porno fue de zoofilia., nada de chupeteos y ensanchamientos. En la que yo vi, un perro dinamitaba un túnel como en el Carmelo.

Nada fue como esperaba.

Raimon dijo...

Glande!!!

Nunca te había visto tan entusiasmado por un tema, Sub.

Si yo te contara... aun recuerod mi número de carnet del videoclub.

Por cierto, Soy puta y mi coño lo disfruta es una película de Carmen de Mairena. Tú sabrás.

doctor BE dijo...

No miento como ningún bellaco: aunque nadie se lo crea, nunca he visto una peli porno entera. Una vez que mi hermano y sus amigos pilaron una estuve un rato viéndola, pero a la media hora me volví a jugar con el Spectrum. Las pocas veces que he visto trozos de alguna me he aburrido soberanamente. Además me pone nervioso que sean tan falsas las actuaciones (gemidos, etc.), y no me gustan las cosas tan explícitas (no le veo ninguna gracia a un primer plano de una penetración, la verdad).
De hecho tuve una novia que en la cama actuaba como en una peli porno (gemidos casi-forzados, frases del rollo "damé más" o "hasta el fondo", etc. etc.), y me cortaba bastante el rollo cuando lo hacía (a veces incluso me daba la risa). (Un beso, Ana, sin acritud).

Corser dijo...

Pero que coño es esto? Aqui no se hacia crítica de películas? El administrador del blog está perdiendo el norte: enlaces cutres a escenas de pelis, ahora esto...
Pero como lo cortés no quita lo valiente (nose exactamente que significa esta expresión pero queda muy bien), gran post, coño! Cuanta verdad hay aqui expuesta; qué complicado era antes ver una pornaca cuando no disponiamos de mas medios audiovisuales que un video VHS o Beta, propiedad de nuestros padres. La de tretas y planes que se tenian que trazar como si de un campo de batalla se tratara para verlas y qué sensación de riesgo suponía verlas. Cualquier ruido que habia en la casa te hacía saltar todas las alarmas, creyendo que tus padres habían entrado, haciendo que batiéramos auténticos récords de tiempo en subida de pantalones&gallumbos + cambiar de canal + para el video + cruzar las piernas para que no se notara en exceso el miembro erecto + poner cara de disimulo en plan "estaba aqui viendo la tele tranquilamente". De locos.
Ah! Y una de las sensaciones mas horrorosas que recuerdo fue una vez que, en el justo momento de echar la lefada, entraron mis padres en casa. Por suerte habia cerrado la puerta del recibidor, y eso me dio unos segundos de margen que me permitieron arreglar un poco el desaguisado, pulverizando todas mis plusmarcas en los 5 procesos que comenté antes.